BARBO
Nombre genérico que se aplica indistintamente a todos los peces del género Barbus. Familia de los Ciprínidos. Son peces dulceacuícolas de tamaño medio; entre sus caracteres distintivos destaca la boca ínfera y protractil que se cierra por dos labios gruesos, carnosos y blanquecinos, de los que nacen cuatro barbillones con función táctil. Los barbos viven en aguas claras y corrientes, aunque no torrenciales, especialmente en los cursos medios y bajos de los ríos, si bien pueden ascender hacia zonas de montaña, siempre que cuenten con hábitats adecuados.
En Navarra se encuentran dos especies de barbos, cuya diferenciación no siempre resulta fácil. El “barbo común” (Barbus bocagei) es muy abundante en los ríos navarros y está ampliamente distribuido por todas las cuencas de la vertiente mediterránea. Aunque ya en la Montaña pueden encontrarse barbos comunes en aquellos tramos de mayor profundidad y menor corriente, las mayores poblaciones se distribuyen junto con las madrillas por los cursos que bañan la Navarra Media y Ribera. La otra especie es el “barbo de montaña” (Barbus graellsi). Aunque es difícil de distinguir de la anterior, se puede diferenciar por su aspecto más estilizado; la presencia de motas negras en su cuerpo, que se extienden por la aleta caudal y persisten a lo largo de toda su vida; y la coloración rojiza en la base de las aletas anal, ventrales y pectorales. El barbo de montaña es menos frecuente que el común en Navarra. Se encuentra, abundante, en los tramos superiores de Esta, en el Salazar y también en el Aragón, al menos en el sector comprendido entre Yesa y Gallipienzo. Es posible que viva en otros ríos y que su distribución en nuestra región sea más amplia. En el Valle de Roncal se le conoce con el nombre de “Culirroyo”, distinguiéndolo del Barbo común; es muy apreciado gastronómicamente por la finura de su carne y se le compara con la calidad de la trucha. En otras zonas se le llama “barbo-trucha”.
En la Ribera llaman “barbo pedrero” a los barbos jóvenes, de 10 a 15 centímetros de longitud, que tienen el cuerpo moteado de negro y viven en los rápidos del río, en zonas de poca profundidad y fuerte corriente, cobijados detrás de las piedras del fondo
(Fuente: Gran Enciclopedia de Navarra)